CREENCIAS Y AGUEROS
Algunas de las creencias populares y agüeros que todavía se conservan en Chitagá
son:
• El viernes santo a las tres de la tarde se abren los tesoros, se arranca una mata de
berenjena para buscar los carbones que hay en su raíz, los cuales se guardan para la
buena suerte
• El baño con hierbas aromáticas para alejar la pava o mala suerte
• Ponerse la ropa interior al revés, contra la brujería
• Colocarle a los bebés manillas con azabaches para evitar el mal de ojo
• Quemar ramo bendito para que deje de llover cuando hay tempestades
• Cuando llega un colibrí y una libélula a la casa se dice que va a llegar una visita
• Al levantarse colocarse primero el zapato derecho
• No andar de para atrás porque se encuentra con el diablo
• En el campo cuando cantan los búhos al día siguiente llueve
• No se podía barrer los días santos porque al hacerlo se azotaba a Jesucristo
• En los negocios o tiendas, no barrer hacia fuera porque no se vende en el día o en
la semana
• Barrer con altamisa (arte misa) para atraer la buena suerte
• Cuando se coloque a hervir la leche no dejarla botar porque se le seca la leche a la
vaca
• La mujer durante la menstruación no podía bañarse, ni peinarse porque se le caía
el pelo, los alimentos los comía debajo de las cobijas, no podía tomar leche ni frutas
ácidas.
• Para cortar madera de construcción tenía que ser en la fuerza de la menguante
que fuera viernes y que no fuera al lado de las corrientes de agua porque se picaba
• Para castrar un animal (Toro, caballo, cerdo), tenía que ser tres días antes de la
luna nueva o tres días después, porque si no decían que lo picaba la luna o que se
alunaba.
• Cuando la pascua de semana santa caía en marzo era año fatal
• Cuando cantaba el búho o surrucú a principio de noche era para llover, cuando
cantaba en la madrugada era para hacer verano.
martes, 31 de marzo de 2015
LEYENDAS NORTE DE SANTANDER
Leyenda de amor de Zulia y Guaymaral
Cuando los indígenas del Norte de Santander aún eran libres, existían muchas comunidades, una en especial llamada cíneras, quienes siempre tuvieron conflicto con los guanes, de Santander. El cacique Cínera cansado de tanto pelear, envió a su hija Zulia en misión de paz a tierras de los guanes. Estando Zullia allí, apareció por estas tierras un español, Diego de Montes y arrasó con la comunidad ciñera y al indefenso cacique lo ahorcó colgándolo de un árbol de caracolí. Cuando Zulia venía de cumplir su misión de paz, se encontró con un reducto de indígenas cáchiras que huían despavoridos de los españoles y contaron a Zulia lo que había pasado a su pueblo. Zulia, que no se atrevía a creerlo, porque en su mente no cabía que el ser humano fuera tan perverso, se disfrazó de vasallo, llegó hasta muy cerca de su casa y pudo observar con sus propios ojos que efectivamente su padre colgaba de un árbol de caracolí. De sus bellos ojos brotaron lágrimas de indignación, de su pecho salió un grito de dolor y de sus labios salió un llamado a todos los indígenas de los alrededores. A este llamado acudieron, guanes, cáchiras, chitareros, cotecos y cúcutas. Con los cúcuta acudió un príncipe indígena llamado Guaymaral, hijo del cacique Mará que habitaba el lago de Coquivacoa.
Más de dos mil indígenas acudieron al llamado de Zulia, en la actual Pamplona, y armaron dos columnas: mil al mando de la hermosa princesa y mil al mando de Guaymaral, marcharon sobre el campamento español que se encontraba ubicado en el sitio actual de Arboledas y Diego de Montes no supo en qué momento pagó con su vida todas las maldades y robos que le había hecho a los indígenas. Esa noche los indígenas triunfantes festejaron con alegría y jolgorio, y Zulia y Guaymaral se unieron en matrimonio y fijaron su residencia al lado del torrentoso río Sulasquillo. Vivieron felices por varios años hasta que llegó otro español, Diego de Parada y los tomó al descuido arrasando con todo lo que encontraba a su paso. Hay quienes contaron que vieron a Zulia morir a caballo, incitando a sus guerreros a la lucha y Guaymaral herido, huyó buscando la protección de su padre y prometió que todo lo que tocara se llamaría como su gran amor, Zulia. Es así cuando mal herido atraviesa el torrentoso río Sulasquilla y lo bautiza Zulia. El pueblo donde vivió ahora se llama Zulia y cuando toma posesión de sus tierras a la muerte de su padre, se crea el Estado Zulia de Venezuela.
Del Mito a la leyenda, Fabio Eliécer Monrroy.
POESIA ROMANTICA
¿Qué Es El Amor?
Armonioso ritmo de dos notas
Indefinible elixir mágico
Murmullo de almas paralelas
Volcán de deseo que va a arder
Atmósfera de recóndita atracción
Atadura de ambos pensamientos
Vuelo de dos pájaros en el azul
Espuma de olas que convergen
Puente de dicha en dos direcciones
Rescate del tiempo que se ha ido
Dos suspiros fundidos al viento
Sol de razón que rompe las nubes
Vino espumoso que embriaga
Embajada del sueño del futuro
Un papel escrito a dos caras
Dos miradas siempre enlazadas
Melodía sublime cantada a dúo
Poesía realizada en dos versos
Sepulcro eterno de la soledad
Nube esponjosa que nos mece
Mil pensamientos entregados
Fuente de deseos ofrecidos
Faro guía de dos vidas
Simiente de paz duradera
Silencios que envejecen compartidos
Cortejo de los días más bellos
Antesala de la muerte sin dolor
Todo eso... es el amor
(Miguel Angel Aguilar Muñoz)
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